Monasterio de Valvanera en Anguiano, La Rioja
El Monasterio de Valvanera se encuentra en un entorno de gran belleza natural, rodeado de montañas y bosques en la sierra de la Demanda, en el municipio riojano de Anguiano. Es un lugar de recogimiento espiritual y, al mismo tiempo, uno de los símbolos más profundos de la identidad riojana, pues custodia la imagen de la Virgen de Valvanera, patrona de La Rioja.
Sus orígenes se remontan al siglo IX, cuando, según la tradición, un ladrón arrepentido llamado Nuño descubrió en el hueco de un roble la talla de la Virgen, junto a un panal de abejas y un enjambre, signo de fertilidad y vida nueva. Este hallazgo dio lugar al culto mariano y al nacimiento de una pequeña comunidad monástica, que con el tiempo se consolidó bajo la regla benedictina.
El conjunto arquitectónico actual muestra la huella de distintas épocas. La iglesia, de estilo gótico tardío del siglo XV, presenta una amplia nave cubierta con bóvedas de crucería y un retablo barroco que enmarca la venerada imagen románica de la Virgen de Valvanera, tallada en madera de nogal en el siglo XI. A su lado se conservan dependencias monásticas, claustros y estancias que hablan de la vida de oración y trabajo que durante siglos caracterizó a los monjes.
A lo largo de su historia, el monasterio vivió momentos de esplendor y también de decadencia, especialmente tras la desamortización del siglo XIX, cuando fue abandonado. No obstante, a finales del mismo siglo fue recuperado por la orden benedictina, que sigue custodiándolo hasta hoy.
El entorno natural que rodea Valvanera es otro de sus grandes atractivos: frondosos bosques, manantiales y rutas de montaña invitan a la contemplación y al senderismo, convirtiendo la visita en una experiencia completa de espiritualidad y naturaleza.
El Monasterio de Valvanera es, en definitiva, un lugar donde historia, fe y paisaje se unen, ofreciendo al viajero la posibilidad de descubrir uno de los rincones más emblemáticos y serenos de La Rioja.